Para comenzar, a parte de concienciarte bastante de la tarea que te queda por delante, nos hacemos con una desbrozadora para segar y cortar todas las hierbas, zarzas, cardos, etc que tengamos, que son muchas, y así poder incorporar la gran cantidad de plantas cortadas, al suelo progresivamente a modo de abono. Aunque no creo que la tierra lo necesitara debido al gran descanso de la misma después de tantísimos años, pero todo lo que se le pueda aportar vendrá bien. Sino deseamos incorporarle a la tierra en el momento también podemos echarlo a un compostero ya que quizás lo necesitemos para años venideros. Recomiendo que para estos casos (parcela-selva con cardos de metro y medio de altura) no utilizar el hilo con la desbrozadora a no ser que sea de metal porque aparte de gastar metros y metros de hilo se enredará continuamente las hierbas en el cabezal. Una vez gastéis dos rollos de hilo y aburridos de no avanzar demasiado optareis por el disco de metal que aunque corta menos al tener menos radio termina por ser más rápido. 
Durante este tiempo podemos aprovechar y vallar la parcela si teníamos pensado hacerlo e ir sembrando en el semillero lo que tengamos en mente y cuadre con la época del año en que nos encontremos, para así poder trasplantarlo cuando este tiempo termine.
